BRINDEMOS
Cariño me dijiste debemos
hablar.
Y compré una tostadora
para que,
de dos en dos igual que
el par nuestro de cada día,
templáramos las ideas
antes de arrojarlas a la cara como piedras de hielo.
Batimos tus agravios y
los míos hasta hacer de ellos una crema espesa
con que cubrir casi
todas las carencias.
Aquellas que no, fueron
horneadas a máxima temperatura
con exterminio
pirolítico de todo residuo y vida.
Que no quede rastro de
los momentos raros.
Aficionados a los
libros de cocina francesa y las recetas imposibles
preparamos grandes
platos hechos con poco amor y prisas:
Le Nouveau Junk Food,
la bautizamos.
Y exportamos por casas
de amigos, provincias y países.
Triunfa hoy en el mundo
entero esta vil forma de sobrevivir
alimentándose de
sobras, despojos y productos malolientes caducados.
Metimos casi todas
nuestras diferencias imposibles en la olla exprés,
tamaño maxi regalo de
aquellos estúpidos primos del pueblo
por aquel lejano día en
que sin quererlo nos casamos.
Reventó al igual que
casi todo con un poco de presión. Y lo que no,
con más.
Asamos por Acción de
Gracias un pavo que no gustó más que a los perros.
Para Navidad ya no nos
gustamos nosotros.
Cariño hablemos que hoy
es uno de enero.
Arranquemos al año
nuevo nuevas promesas que sabemos nunca cumpliremos.
Cortémosle pedazos si
fuera necesario para digerirlo mejor,
y evitar atragantarnos
en este inútil empeño de vencer a lo invencible.
E inevitablemente perdido
está.
Cariño hablemos comamos
disimulemos follemos para matar el aburrimiento.
Salgamos a comer
vayamos de copas quedemos con los amigos
para desentendernos.
Hagamos como que nos
entendemos.
E interesamos.
© CHRISTOPHE CARO
ALCALDE
No hay comentarios:
Publicar un comentario