lunes, 27 de mayo de 2013

EL PROCESO

EL PROCESO


Por gritar contra el régimen vinieron a detenerte.
Imbécil, qué esperabas, ¿acaso que te escucharan?
En señal de advertencia por tener ideas propias;
impropias de un estado policial.
En señal de amenaza para quien ose seguirlas.
Propio actuar de este estado policial.

Te esposaron como a un ladrón. Insultaron como a un asesino;
incluso, tus propios vecinos. Amigos del linchamiento estos y aquellos.
Te golpearon como a un informante te torturaron como a un activista:
por los derechos humanos los únicos en tener derechos,
¿para esto los inventamos?

De comer te dieron sopa de cebolla. De rabo de cebolla.
Para dormir cama de hormigón, por compañía las ratas de la memoria.
Todo bajo las cámaras no fueras a suicidarte tragándote tus palabras:
quiere el régimen que lo hagas pero busca que no se note
o comprometerás al estado. Mejor que parezca un accidente. Desgraciado.

Noventa días de detención con sus noventa noches de palos,
posterior a noventa tardes de cables
en garganta para que calles en genitales que hables,
sólo de lo que conviene,
parecen ser suficientes antes de confesar ante el juez
que eres responsable de todo:
mataste a King en un barco a Kennedy desde un aeroplano
a Ghandi fue de hambre. 

Afirmo señor juez convencido que soy el peor enemigo
de este régimen de bien intencionados.
A las feministas reprimo exigiéndoles contar la verdad.
A los gais insulto llamándoles oportunistas.
Contra la iglesia blasfemo cada vez que reclamo un poco de caridad.
A la casta política ofendo exigiendo participar.
El poder económico dinamito pidiendo mejor reparto social.
Al Supremo he ensuciado cuando afirmé que eran colocados a dedo.
A los inmigrantes mancillo diciendo que son unos desintegrados.
Las putas unas ligeras de ropa los policías compañeros de porra
traficantes gente muy puesta verdes gente protesta.

Sí señor juez pido un justo castigo por haber atentado contra el régimen.
Imbécil, qué esperaba:
pensé que era una democracia esta tiranocracia.



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

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